A continuación les muestro una serie de artículos, lo mas, condensados posible; dirigidos a los jóvenes Venezolanos, con la intención que los lean, analicen, reflexionen y los orienten en el camino a seguir para formar un país grande - no por sus recursos naturales - sino, por el saber y la inteligencia de su gente.
Para pensar, Reflexionar y…
Guillermo leal Ceballos
En ningún libro de historia medieval se reseña que se haya ganado una patria o recuperado un territorio por medio de La Palabra. Esto, se logró solo a través de una acción… ¡la guerra!
En Venezuela tenemos el caso de la recuperación, a finales del siglo XX, de cierta cantidad de territorio en los límites con Brasil -país mejor armado de Sudamérica- . Única vez que Venezuela ha recuperado territorio; logro obtenido gracias a los buenos oficios llevados acabo por el ciudadano Dr. Rafael Caldera y un ilustre equipo de ciudadanos; cuya excelente formación académica y gran sentido venezolanista, nadie debería poner en duda. En razón a esta acción, los venezolanos pudimos ondear la bandera tricolor y de siete estrellas en un territorio verdaderamente recuperado, por los venezolanos.
Ahora bien, en la historia contemporánea o “civilizada”, una serie de lideres han utilizado La Palabra para dominar o engañar a la población; bien lo ilustra el escritor Brasileño Pablo Cohelo en su obra “La Quinta Montaña” al expresar lo siguiente: (…) “De todas las armas de destrucción que el hombre fue capaz de inventar, la más terrible, la más poderosa, era La Palabra. Los puñales y las lanzas dejaban vestigios de sangre; las flechas podían ser vistas a distancias, los venenos terminaban por ser detectados y evitados. Pero La Palabra conseguía destruir sin dejar rastros” (…).
Hoy los líderes de la nación; deben reflexionar sobre el contenido expresado anteriormente por el famoso escritor; ya que, la nueva forma de conquista no es a través de las armas sino… ¡de La Palabra!
La experiencia adquirida en la vida y en la lectura, nos permite afirmar lo siguiente: Al dividir a los hombres que integran un ejército; se gana una batalla. Pero al dividir a los Ciudadanos de una nación, usando como arma La Palabra; se conquista (o se debilita el país; sí es el tuyo) un país; y esta conquista en el siglo XXI, se logra al mantener separado la clase trabajadora física (mineros, agricultores, obreros de la construcción, obreros en general) de la clase trabajadora intelectual (oficinistas, secretarias, vendedores, médicos, ingenieros, docentes, dibujantes, artistas, periodistas, comerciantes, profesionales en general etc.).Al lograr romper la comunicación entre ambas clases, se facilita que, el extranjero conquistador, ocupe sin mayores problemas; los espacios que pertenecen naturalmente a estas clases. Esta conquista se evidencia en Venezuela; por el hecho que, cualquier extranjero, puede ocupar los cargos de los trabajadores intelectuales venezolanos, sin ceñirse a las leyes que protegen al trabajador intelectual nacional; obteniendo el extranjero, los recursos económicos necesarios para vivir cómodamente; todo esto a costa de la pérdida del empleo, en su patria, del trabajador intelectual venezolano. De la misma forma ocurre con los empleos de los trabajadores físicos. Quienes aún estando bien física e intelectualmente; se ven en la necesidad de recolectar alimentos en la basura para subsistir; ya que su empleo lo ocupa un nuevo conquistador extranjero.
Esa forma de tratar al trabajador físico o intelectual venezolano, se puede basar en un pensamiento de Nicolás Maquiavelo; quien en su libro “El Príncipe” redactado en 1513; expone como deben ser manejados los estados conquistados, cuando están acostumbrados a vivir con sus leyes y en república. El escritor afirma que, se deben adoptar alguna de las resoluciones siguientes:
1. Arruinarlos
2. Ir a vivir en ellos
3. Dejar a estos pueblos sus leyes, obligándolos a pagarte una contribución anual y creando en su país un tribunal de un corto número que cuide de conservártelos fieles.
Estimado lector: ¿cómo podemos ejemplarizar en la actualidad lo expresado por Nicolás Maquiavelo en el primer punto? Esto se puede observar en el hecho que, para arruinar hoy a un venezolano; profesional de cualquier área, basta con no darle un trabajo o empleo, éste, para sobrevivir termina ejerciendo otras profesiones, mal remuneradas que, no necesitan para ejercerla ninguna formación académica. Perdiendo la nación uno de sus miembros más valiosos en la lucha por salir del subdesarrollo; en un mundo nuevo y competitivo. Para hacer un ejemplo simple: un medico venezolano debe ejercer la profesión de taxista, trasladando médicos: cubanos, chinos, coreanos, argentinos etc. Para sostener su familia. Ahora imagínese que el medico venezolano es su hijo o su nieto o… usted.
Los comerciantes, ganaderos, empresarios, agricultores deben pagar grandes suma de dinero para su seguridad; o grandes suma de dinero por secuestros que, finalmente terminan arruinándolos, lo que da pie a que el nuevo conquistador ocupe las posiciones de los venezolanos.
El segundo punto sería muy obvio; y difícilmente en el siglo XXI se pueda dar, pero el tercer punto; tomando en cuenta que las fuente de energía son muy importante en este siglo y en los venideros; se intuye que, Venezuela es un estado que pagara sus contribuciones con petróleo, regalado o sub-pagado.
Para finalizar; un segmento de lo expresado, por Nicolas Maquiavelo en su obra “El Príncipe”; respecto a los “inconvenientes”: (…) “ Por esto previniendo los romanos de lejos los “inconvenientes”, les aplicaron el remedio siempre en principio, y no le dejaron seguir nunca su curso por el temor de una guerra. Sabían que esta no se evita; y que si la diferimos es siempre con provecho ajeno.”…¡Y no nuestro!
“Todo cuerpo de la historia enseña que, las gangrenas políticas, no se curan con paliativos.
Simón Bolívar
